sábado, 9 de enero de 2010

Observaremos al niño detenidamente a lo largo de su desarrollo, desde su primer llanto hasta la edad escolar, para ello seguiremos paso a paso los delicados matices de la aparición de sus progresos físicos y mentales. Antes de emprender la descripción sistemática del desarrollo infantil creemos conveniente señalar que no todos los niños son iguales, o mejor dicho, que no hay un niño igual al otro. Hasta entre los gemelos pueden existir diferencias. De aqui que, para interpretar correctamente unas tablas de crecimiento, las cuales sólo indican cifras generales correspondientes a niños de las más diversas contexturas y procedencias, sean necesario ante todo fijarse en la complexión peculiar de cada niño en sí, en su peso al nacer, su alimentación, ambiente físico que lo rodea, enfermedades que han padecido y a que raza pertenece.

CONSTITUCIÓN FÍSICA O COMPLEXIÓN

La constitución física o complexión es la estructura particular adoptada por un niño a consecuencia de ciertos factores hereditarios y bajo el influjo del medio ambiente (alimentación, habitación, clima, enfermedades, etc.) los cuales le confiere unas características propias los mismo en su aspecto externo que en sus respuestas o reacciones tanto físicas como psíquicas. Así pues, la constitución total de un individuo resulta de la suma de los factores hereditarios y de las influencias del medio en que vive. Teniendo en cuenta la inmensa variedad de factores hereditarios que entran en nuestra constitución, desde el color de nuestra piel hasta la forma de nuestros cráneos, y la todavia más compleja diversidad de los factores ambietales, no será díficil que lleguemos a la conclusión de que, en fin de cuenta, cada cual es como es. Sin embargo desde hace tiempo se ha podido comprobar que los niños, al igual que los adultos, presentan ciertos rasgos externos, hábitos o tipos constitucionales, cuyas peculiares características han dado ocasión a varias clasificaciones, una de las cuales, por lo que a los niños se refiere, es la sig:

NIÑO DE TIPO DIGESTIVO, PÍCNICO U OBESO
Aquel que se caracteriza por presentar el vientre grande, algo abombado, un ángulo torácico muy abierto, abundancia de grasa abdominal y facial, cuello corto, boca grande y rostro más ancho en su parte inferior que en la superior. El cuerpo, en su conjunto resulta más bien ancho.



NIÑO DE TIPO RESPIRATORIO O ASTÉNICO


Aquel que presenta el tórax alargado, la nariz grande, un ángulo tóracico ligeramente agudo, extremidades alargadas y el cuerpo, en líneas generales, también alargado.

NIÑO DE TIPO MUSCULAR , ATLETICO O NORMOTIPO

Aquel cuyos rasgos distintivos son: cabeza redondeada, de orejas bien proporcionadas y no separadas en exceso de la cabeza, pelo no muy abundante, de implantacion casi recta sobre la frente, torax y abdomen bien proporcionado, hombros cuadrados y predominio del sisteme muscular sobre la grasa.


NIÑO DE TIPO CEREBRAL


Aquel cuya cabeza es de aspecto en cierto modo triangular, con la parte superior más ancha que la inferior, frente amplia y despejada, implantación del pelo formando una curva cuyo ensanchamiento se acusa hacia la parte alta del cráneo, tórax estrecho, extremidades largas y delgadas, y organos genitales bien desarrollados.

miércoles, 6 de enero de 2010

EVOLUCIÓN DEL PESO DEL NIÑO

El conocimiento del peso correspondiente a cada edad infantil constituye el elemento del juicio mas elemental y práctico utilizado por la mayoría de los padres para formarse una idea acerca del desarrollo de sus hijos. En la cifra del peso de resume el resultado de todos los procesos fisiológicos del organismo en crecimiento, y es muy posible que, si a primera vista un niño no alcanza la cifra media del peso que le corresponde, existan motivos fundados para preocuparse por su estado de salud. No por ello se ha de incurrir en el error de creer que el niño ha de estar enfermo forzosamente si su peso no coincide con el indicado en las tablas generales de peso. Un recién nacido de 2.500 gramos podrá tener tanta vitalidad y tan buenas defensas como otro de 3.200 gramos.

PESO DEL RECIÉN NACIDO

El peso medio de los lactantes se considera que es de 3.200 gramos para las niñas y de 3.400 gramos para los niños. Los límites normales del peso oscilan entre los 2.500 gramos y los 4.500 gramos. Se llama prematuro, en términos generales, al niño que al nacer pesa menos de 2.500 gramos, aunque su nacimiento se haya efectuado dentro del plazo normal. Se llama hipermaduro al recién nacido que pesa más de 4.500 gramos. Se conocen casos de recién nacidos de 6 y 9 kilos. en cambio, el peso mínimo compatible con la vida puede alcanzar cifras tan exiguas como los 700, e incluso los 600 gramos.


PESO DEL LACTANTE

En todos los casos, el peso de nacimiento se reduce en un 10% dentro de los cinco primeros días de vida. Esta disminución fisiológica de peso corresponde a la pérdida de líquidos orgánicos fetales, por lo que es inútil querer evitarla y, desde luego, no debe ocasionar preocupación alguna a los padres. A partir del quinto día es cuando el lactante empieza a ganar peso, y lo hace con una rapidez extraordinaria, aunque, según vamos a ver, ésta irá decreciendo en su intensidad.

PESO EN LA PRIMERA INFANCIA

El niño, en esta época de su vida, aumenta de peso más lentamente aún que en el primer año. Del año a los dos años aumenta unos 5 gramos diarios. De los dos a los seis años aumenta unos 2 kilogramos por año. Del año a los seis años duplica el peso (18 kg.).


PESO EN LA EDAD ESCOLAR

En esta época de la vida, que va de los seis a los diez años en las niñas y de los seis a los doce años en los niños, el peso también aumenta paulatinamente, a un ritmo aproximado de 2 kilos por año. A los diez años, el niño triplica el peso que tenía al cumplir su primer año.


CRECIMIENTO DEL NIÑO EN LONGITUD

Como es natural, la talla no sigue un curso diferente al del peso, pues, como se comprenderá, el desarrollo del cuerpo se efectúa armónicamente en cada niño. Al igual que en el peso, la intensidad del desarrollo en la estatura presenta tres momentos cruciales a lo largo de la vida del niño: en el segundo trimestre del embarazo, en la edad escolar y en la edad puberal. La talla refleja exactamente el verdadero desarrollo fìsico del niño; la ciscunstancias ambientales la hacen variar muy poco, y tiene un límite, fijado alrededor de los 20 años de edad.


LA TALLA DEL RECIÉN NACIDO

Por termino medio un recién nacido mide 50 cm de largo las ñiñas sólo suelen medir 48 cm. En la talla, lo mismo que en el peso, pueden existir variaciones dentro de la normalidad, dependiendo éstas de diversos factores: Estatura de los padres, Clase social, Epóca del año, etc. En cada uno de los primeros trimestres de vida la talla aumenta en 8 cm. En los trimestres tercero y cuarto aumenta 4 cm en cada uno. durante todo el segundo año aumenta sólo otros 10 cm. Así, por ejemplo, una niña que al nacer media 48 cm; al año medirá: 48+8+8+4+4=72 cm y a los dos años: 72+10= 82 cm. Si se trata de un varón bastará con añadir 2 cm al resultado final.


RELACIÓN ENTRE EL PESO Y LA TALLA

Damos a continuación una tabla completa de los pesos y tallas desde el nacimiento hasta la edad escolar. En esta tabla como se indica el peso y la talla correspondiente a cada edad. Toda vez que, normalmente, la talla apenas experimenta variaciones en virtud de las circunstancias ambientales, mientras que en estas, en cambio si afecta en gran medida al peso, será por la talla por la que nos guiaremos para juzgar de la normalidad o de la anomalía de un caso determinado. http://www.crecerjuntos.com.ar/tablas.htm

miércoles, 9 de diciembre de 2009

Primera infancia

En la primera edad de los niños están en total concordancia con su entorno físico, absorbe el mundo de manera primordial por medio de sus sentidos y responden en el modo más activo de conocimiento.